10 COSAS QUE TIENES QUE HACER SI VERANEAS EN ALARCÓN

1. Explora la Fortaleza de Alarcón.

2. Sumérgete en la belleza arquitectónica de sus edificios..

Aunque Alarcón es muy pequeño, recorrer sus calles longitudinalmente es una lección de historia de la arquitectura. Paseando por sus calles, descubrirás la evolución de la arquitectura desde el siglo XII hasta finales del siglo XX.

En la plaza del Infante Don Juan Manuel encontrarás uno de los primeros Palacios de Concejo de la provincia de Cuenca (principios del s. XVI) con los escudos de Diego López Pacheco, segundo Marqués de Villena. También, encontrarás la antigua iglesia renacentista de San Juan Bautista, en su portada hay imágenes talladas de San Juan Bautista y de Cristo Salvador, y si la rodeas, encontrarás algún detalle de la versión original de esta iglesia (anteriormente era románica y la derribaron en 1578).

En la plaza de Santo Domingo de Silos, está la iglesia que lleva dicho nombre, es la más antigua de Alarcón, en portada,  con arquivoltas apuntadas, que revelan un gótico incipiente, encontrarás varios relojes de sol.

Junto a esta iglesia, o convertida en Auditorio y Sala de Exposiciones, en la calle cercana encontrarás una de las portadas renacentistas más bonitas de la provincia de Cuenca, la cual se le atribuye al escultor Esteban Jamete. Esta portada pertenece al Palacio de los Castañeda, hoy sede del Museo del Ruso (MOA). En las temporadas de verano y otoño encontrarás alguna interesante exposición.

Delante de Santo Domingo de Silos se muestra espectacular en volumen la parroquia de Santa María, la más importante de las 5 parroquias de Alarcón y única que se utiliza para el culto actualmente. Aunque desde esta plaza vemos la cara norte, más austera, al rodearla por el callejón de las campanas, veremos su fachada más espectacular, la sur. Es digna de las catedrales renacentistas más importantes, obra de Jamete se elabora en un renacimiento bellísimo, con mucha finura y detalle en los motivos ornamentales. Utiliza el zoom del teléfono o la cámara, para disfrutar de ellos y encontrarás un montón: los evangelistas con su tetramorfos, los elementos de la crucifixión en homenaje al Cristo de la fe, patrón de Alarcón, mártires y santas, incluso calaveras con alas. Si tienes curiosidad sobre la ausencia de imágenes, puedes preguntar al guía.

No te olvides de bajar hasta la entrada de Alarcón para ver la cuarta iglesia, la iglesia de la Santísima Trinidad, es una de las más peculiares de Alarcón, porque ha sufrido más transformaciones que en ninguna, desde el siglo XIII hasta el XX. Estas han dado lugar a un espacio heterogéneo pero bonito y mágico, que en las visitas guiadas disfrutarás enormemente. Aunque en el exterior ya merece la pena disfrutar de su arquitectura, principalmente su portada plateresca, de comienzos del siglo XVI. Está llena de cantidad de animales mitológicos: sátiros, sirenas, grifos, aves del paraíso, etc , encontrarás un montón.

 En la parte alta, dos escudos de los personajes que pagaron la obra y en su bóveda gótica, de nuevo, los cuatro evangelistas representados con sus animalitos (tetramorfos).

Todo este paseo lo puedes acabar en el Castillo, que, aunque tiene formas más rudas dada su utilidad, aún conserva elementos góticos en los arcos apuntados de los salones, canecillos en el exterior del edificio de la guardia (actual Bar y Restaurante) y una torre del homenaje, rematada con elementos renacentistas (doble almenado con matacán corrido).

Así como puedes ver solo el paseo exterior de Alarcón, te va a sorprender.

3. Pasea  por la ribera del río Júcar.

4. Aventurate en Kayak en el río Júcar.

Alquila un kayak y explora el río Júcar desde la presa de Henchideros y río arriba recorre el interior del cañón lo que te dará una perspectiva diferente de Alarcón.

Verás desde abajo la torre de los Alarconcillos y Cañavate, disfrutarás de los patos escondidos entre las aneas y si navegas a primera o última hora del día verás como las carpas suben a comer (son enormes, inofensivas pero espectaculares).

Conecta con la naturaleza mientras remas en aguas cristalinas.

5. Degusta la gastronomía local.

6. Recorre sus calles empedradas.

Sin duda, el encanto del casco antiguo de Alarcón reside en su embriagadora mezcla de historia y belleza arquitectónica. Al caer la tarde, un paseo por sus empedradas y serpenteantes calles se convierte en una experiencia mágica. 

Sumérgete en el descubrimiento de fascinantes rincones, como la Plaza de San Juan, escondida detrás de la iglesia homónima. En ella, quedarás cautivado por las impresionantes vistas de la altiva torre de Cañavate. Desde aquí, podrás iniciar un encantador paseo por la calle la Tercia, que te llevará hasta la pintoresca plaza de Santo Domingo. Caminando, te impresionará el magnífico tamaño del cerro de los Alarconcillos y la misteriosa torre que lleva su nombre.  Cuando llegues a la plaza, disfrutarás de uno de los espacios monumentales más llamativos de Alarcón, con vistas de la iglesia de Santo Domingo de Silos y de la parroquia de  Santa María mientras te relajas en la terraza de El Rincón de Alarcón saboreando una bebida fresca o un delicioso helado.

Sigue caminando hasta el aparcamiento del Castillo, junto a él, encontrarás, uno de los miradores más impresionantes de Alarcón, el Mirador de la Peña, desde este lugar la vista de la Fortaleza medieval es impresionante y también disfrutarás de la gigantesca hoz del río Júcar con sus colores, que son una delicia para la vista. 

Finalmente, dedica un tiempo a explorar el resto de las tiendas locales. Encontrarás una variedad de productos únicos y típicos de la región que te permitirán llevarte a casa un pedazo de esta maravillosa localidad.  Entre ellas, en el Jardín Escondido, podrás disfrutar además de un entorno idílico, de una muestra de artesanía muy interesante.

Este recorrido te dará la oportunidad de empaparte de rincones preciosos de Alarcón, mientras disfrutas de su cautivadora belleza al mismo tiempo.

7. Contempla el atardecer desde el Mirador de la torre de Armas.

8.Disfruta de los extraordinarios cielos nocturnos de Alarcón.

Cuando cae la noche en Alarcón, se despliega un espectáculo celestial que te dejará sin palabras. Uno de los secretos mejor guardados de este rincón es su cielo nocturno, un regalo de la naturaleza que se muestra en todo su esplendor gracias a la escasa contaminación lumínica del lugar.

¿Qué mejor manera de apreciar esta maravilla que desde el Mirador de la Peña o la imponente Torre de Armas? Allí, en la quietud de la noche, te aguarda un espectáculo astronómico que te transportará a universos distantes. El cielo de verano de Alarcón se tiñe de miles de destellos, revelando la inmensidad del cosmos y recordándonos lo pequeños que somos en comparación.

Sin embargo, hay un momento en particular que eleva esta experiencia a otro nivel. Durante los días de las Lágrimas de San Lorenzo o Perseidas, en mitad del mes de agosto, sobre todo,  el cielo se convierte en un escenario de lluvia de estrellas fugaces. 

Maravíllate ante la cascada de luces que descienden desde lo alto, como si el universo mismo estuviera haciendo un regalo especial a la tierra.

Imagina estar rodeado por la oscuridad de la noche, el murmullo suave del viento y el brillo de las estrellas que parecen estar al alcance de tu mano. Es en estos momentos que te das cuenta de la verdadera grandeza del cosmos y cómo Alarcón, con su entorno natural y tranquilo, te brinda la oportunidad de conectarte con algo mucho más grande que nosotros mismos.

Así que, cuando llegue la noche, no dudes en alzar la mirada y sumergirte en este espectáculo celestial. Déjate llevar por la inmensidad de los cielos nocturnos de Alarcón y permítete vivir una experiencia que tocará tu alma y te recordará la belleza de la simplicidad y la maravilla del universo.

9. Date un refrescante baño en las Moreras.

10. Conecta con la historia de Alarcón

Sumérgete en una experiencia enriquecedora al unirte a una apasionante visita guiada por Alarcón. En este paseo a través del tiempo, serás acompañado por los guías más conocedores y entusiastas de la localidad, quienes te revelarán los secretos y las historias que laten en cada rincón de este emblemático lugar.

Siempre que explores un nuevo destino, recomendamos encarecidamente unirte a una visita guiada, y en Alarcón, esta recomendación se vuelve aún más crucial. Los guías locales son la clave para desbloquear el verdadero tesoro histórico y artístico de un lugar. Ellos no solo son narradores apasionados de la historia, sino que también te conducirán a través de los umbrales de los edificios históricos, dándote acceso a un mundo que normalmente está cerrado para los visitantes.

En Alarcón, esta inmersión en la historia se convierte en una experiencia completa y fascinante. Conocerás la historia de una de las villas más destacadas de la Edad Media en Castilla mientras paseas por sus calles empedradas. 

Pero eso no es todo: los guías te llevarán al interior de los edificios, revelando tesoros arquitectónicos y artísticos que a menudo pasan desapercibidos.

Imagina estar en medio de una conversación con el pasado mientras caminas por el adarve del Castillo que en su día paseó Alfonso VIII, o admirar la majestuosidad de uno de los retablos renacentistas más impresionantes de la provincia de Cuenca, y empaparse de la esencia de la Pintura Mural de Jesús Mateo. 

La historia cobra vida a través de las palabras de nuestros guías, convirtiendo tu visita en una experiencia que no solo enriquece tu conocimiento, sino también tu aprecio por la belleza y el legado de Alarcón.

Así que, si deseas conectarte con la historia de Alarcón de una manera única y cautivadora, no dudes en unirte a una visita guiada. Prepárate para sumergirte en las historias y los secretos de este la villa y descubrir la magia que reside en cada esquina de esta joya histórica.